Hacerlo bien... y a la primera

Seguimos en Moscú, donde ha saltado la primera gran sorpresa de estos Campeonatos del Mundo: Lavillenie no ha ganado la pértiga. Ha hecho la misma marca que el campeón, el alemán Raphael Holzdeppe: 5,89, que ha firmado un concurso impecable, saltando todas las alturas a la primera, mientras el francés ha hecho nulos en todos sus saltos. El bronce ha sido para el alemán Bjorn Otto, con 5,82, la misma altura que el americano Walker y el también alemán Mohr, que se han quedado sin medalla por los nulos. Está claro que Lavillenie es el mejor -alguno de sus saltos válidos han sido espectaculares- pero no es la primera vez que pierde con Holzdeppe: ya sucedió este año en Roma.

Desde el primer lanzamiento, la pluricampeona Valerie Adams se ha puesto en cabeza del concurso de peso y luego ha ido mejorando hasta llegar a los 20,88 metros que le han dado la medalla de oro. La de plata ha sido para la alemana Christina Schwanitz, que ha esperado al último lanzamiento para hacer marca personal (20,41) y colgarse la medalla de plata. El bronce ha sido para la china Lijiao Gong, que se ha quedado en 19,95.

También desde el principio, el polaco Pawel Fajdek ha liderado el lanzamiento de martillo, con la mejor marca del año: 81,97 metros. El campeón olímpico, el húngaro Krisztian Pars se ha conformado con la plata (80,30) y el checo Lukas Melich ha sido bronce lanzando 79,26 metros.

Sin embargo, Christine Ohuruogu ha tenido que esperar hasta el último metro para llevarse el oro en los 400 metros, con record del Reino Unido: 49":41, el mismo tiempo que le han dado a la líder del año: Amatle Montsho, que ha llegado desfondada. Sorpresa relativa porque la britá-nica, que ha competido mucho menos, ya batió a la atleta de Botswana en Birmingham. Tercera ha sido la rusa Antonina Krivoshapka (49":78).

Desde la primera valla ese armario ropero que responde al nombre de David Oliver ha tomado la cabeza de los 110 metros vallas, que ha ganado con enorme superioridad y la mejor marca del año: 13":00. Su compatriota, también americano y veterano, Ryan Wilson ha sido segundo (13":13) y el ruso Sergey Shubenkov un buen tercero (13":24), beneficiado por el tropezón de Jason Richardson y la alarmante baja forma del campeón olímpico y recordman mundial Aries Merritt, que ya se metió por los pelos en la final.

En las semifinales de 400 metros, LaShawun Merritt me ha gustado más que el favorito: Kirani James. Veremos qué pasa en la final, para la que ha sido necesario bajar de 45", con profusión de marcas personales y records nacionales. 

Con más superioridad y también con mejor marca del año (10":71), Shelly-Ann Fraser-Pryce ha despejado todas las dudas. Sigue siendo la mejor... y la más simpática. La escultural Murielle Ahouré ha sido segunda (10":93) y la renacida Carmelita Jeter tercera (10":94). Esperaba más de la nigeriana Blessing Okagbare, que ha competido muy por debajo de su nivel.

El heptathlon femenino está comandado por la ucraniana Ganna Melnichenko con 3.912 puntos. La canadiense Brianne Theisen-Eaton, rubia, guapa y esposa del hombre 10: Ashton-Eaton, ha acaparado la atención de las cámaras y va cuarta con 3.810 puntos. A ver qué pasa mañana.

En la calificación de disco no ha habido sorpresas. Robert Harting, con un solo lanzamiento, a la primera, ha encabezado la relación de finalistas, en la que estarán los españoles Mario Pestano y Frank Casañas. ¿Volverá el alemán a romper su camiseta?

Otro español, Ángel Mullera, se ha metido en la final de los 3.000 metros obstáculos con una buena marca: 8':19":26, favorecido por correr en la serie más rápida, la primera, ganada por el francés Mekhissi-Benabbad. Roberto Alaiz y Sebastián Martos se han quedado fuera, con marcas discretas.

En los 400 metros vallas, normalidad absoluta entre los hombres. Para clasificarse ha sido necesario correr por debajo de 50". En las chicas sí que ha habido alguna sorpresa: la jamaicana Kaliese Spencer y la americana Georganne Moline se han quedado fuera.

¡Qué importante es hacerlo bien... y a la primera!