Me equivoqué. Y menos mal, porque la etapa de hoy ha sido realmente dura. Pili, digo Pilar, mi mujer -prefiere que la llamen así- estaba realmente fuerte y me ha llevado con el gancho los 23,6 kilómetros desde Padrón hasta Santiago, con una primer parte bastante llana, que ha empezado a picar para arriba a partir del primer tercio de la jornada. El tiempo real, sin contar la parada, ha sido de 4 horas y 8 minutos.
Hoy hemos salido a las 8:00 de Padrón y hemos llegado a Santiago de Compostela a las 12:30, justo 120 horas después de nuestra salida de Tui.
La única parada la hemos hecho tras una larga subida por el monte, poco antes del kilómetro 16. Al reanudar la marcha ha salido el sol, pero hemos sido capaces de mantener el ritmo.
Sólo los tres últimos kilómetros, ya dentro de Santiago, hemos sufrido en la larga subida a Santa María de Conxo y en las abarrotadas calles alrededor del Obradoiro, donde costaba transitar.
Al final, nos han salido 118,5 kilómetros y para llegar hemos empleado 21 horas y 49 minutos. Sale una bonita media.
Diariamente, hemos coincidido con más o menos los mismos peregrinos, trabando una cierta complicidad con algunos de ellos. No los he contado, pero creedme si os digo que por este Camino Portugués andan más mujeres que hombres. También, a diferencia del Camino Francés, mucho más largo, hemos visto muy pocos peregrinos en bici.
Hemos disfrutado de un tiempo excelente para andar, de la hospitalidad y de la gastronomía gallega, hasta el punto de que ya estamos planeando volver para hacer alguno de los otros Caminos. ¿Nos decantaremos por el inglés, que sale de El Ferrol y llega a Santiago 5 días después, tras recorrer 118 kilómetros. ¿Y por qué no el Camino Primitivo, que sale de Oviedo y pasa por Lugo, ciudad que todos nos recomiendan visitar?
Nosotros os recomendamos venir a Galicia y hacer el Camino, cualquiera de ellos, seguros de que vais a acertar.
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