La última carrera de Usain Bolt

Bolt cae lesionado. Foto The Telegraph.

Conozco atléticamente a Usain Bolt desde que el 19 de julio de 2002 cuando, sin haber cumplido todavía 16 años, fuera campeón mundial junior de 200 metros, en casa, en Jamaica, con una marca de 20.61.

Cuando seis años después, en los JJ OO de Pekín, maravilló al mundo con dos récords mundiales -y las consiguientes medallas de oro- en los 100 y 200 metros, aluciné con las marcas, pero no con las medallas.

Un año después, en Berlín, repitió y mejoro la hazaña, volviendo a batir los dos récords del mundo, que a día de hoy parecen inalcanzables. 

Así ganó Bolt en los JJ OO de Pekín 2008. Foto Marca

La siguiente gran cita fue en Daegu 2011, donde, en su propia casa, le salió la rivalidad de Johan Blake, que ganó la final de 100 metros, por una descalificación que a mí me resultó sospechosa de Bolt, y vendió muy cara su derrota en los 200 metros.

A partir de ahí, Usain Bolt compitió muy poco y siguió ganando en las grandes citas: JJ OO de Londres 2012, mundial de la IAAF de Moscú, mundial de Pekín 2015 y JJ OO de Río 2016.

Había anunciado su despedida en Londres, con 31 años, renunciando a los 200 metros, distancia, a mi modo de ver, más natural para sus características, pero que requiere entrenar más que los 100 metros.

Usain Bolt ganando 200 metros (19.19) en Berlin 2009

Desde 2009 se ha mantenido en lo más alto gracias a su enorme calidad y competitividad. Y también, siempre a mi modo de ver, porque salvo la corta etapa en la que Blake (que terminaría sancionado por doping) le plantó cara, no ha tenido rivales de su nivel. Es sintomático que haya caído ante un veterano de 35 años. Visto el ranking de este año, su único rival podía ser Coleman, a quien confiaría en ganar más con la cabeza que con los pies.

Personalmente, me he quedado con las ganas de verle en los 400 metros, distancia que por su constitución física y antecedentes, sería, para mí, aquella en la que podría deslumbrar, más aun que en los 100 o los 200 metros.

Retirarse como se retiró ayer, lesionado, no es lo que esperaba el show business del atletismo, ese que tan bien  ha explotado el jamaicano y que tan bien le ha explotado a él.

Estoy convencido de que, salvo problemas físicos insalvables, si Bolt se lo propone como se lo propuso en 2008 y 2009, puede volver a ser ese atleta que ha acaparado los titulares durante los últimos nueve años.

A mí me gustaría volver a verle correr como sólo él sabe hacerlo. Hace falta que quiera y que pueda.