Apuesto a que a todos los que hemos alguna vez la Carrera de Primavera que organizan con mimo los Donostiarrak, la imagen que se nos queda es la del espléndido avituallamiento que ofrecen en los bajos de la U.P.V., a cubierto del frío y la lluvia.
Es una imagen primorosa, llena de colorido, que transmite salud, energía, fortaleza y hasta buen rollo. Y hay más, mucho más.
Una organización minuciosa, cuidada al detalle, respetuosa con el corredor popular. Los tramites para la inscripción son sencillos y amigables. Disponen de información detallada y accesible de todos los detalles necesarios: recorrido, palmarés, aparcamientos, recogida de dorsales, voluntarios, señalización, vigilancia de los cruces, liebres...
Hay un detalle que probablemente no depende de la organización y que puede obedecer a ordenanzas institucionales relacionadas con el uso de los plásticos y la sostenibilidad. Me refiero al uso de vasos de cartón en los avituallamientos en carrera. Como usuario, me resulta mucho más cómoda y eficaz la botella de plástico. En la medida en que se pudiera volver a ella, yo aplaudiría la decisión.
El circuito -los datos lo demuestran- es rápido y permite conseguir grandes marcas. El pasado domingo, con altísima humedad, Joseba Diaz, corriendo en solitario desde el primer metro, ganó con 30:28, nuevo récord de la carrera, mejorando los 30:46 de Eneko Agirrezabal (2013), que no es un cualquiera. ¿Qué hubiera pasado en un buen día y con rivales de más entidad?
Respetando la identificación de la carrera con la U.P.V., creo, modestamente, que el circuito es mejorable. Ahora que está homologado (no sé qué fecha de caducidad tiene esa homologación) quizá no sea el mejor momento para plantear esa cuestión, pero creo que se le podría dar una pensada.
Ahora mismo hay un segmento de corredores que le han dado la espalda a la carrera y se han decantado por los 10 K de Laredo. Puede que no sean el target prioritario de la organización, a la vez que creo que como donostiarras y como gipuzkoanos deberíamos esforzarnos y trabajar para recuperarlos. Esos atletas de hasta 35' que se van a 150 kilómetros de casa buscando atletas de su nivel contra los que competir y con los que sentirse arropados. En realidad, sería aplicable a atletas por debajo de 32'. Y si esos atletas se decantaran por la Carrera de Primavera, encontrarían la densidad que buscan fuera, correrían al calor de su público, atraerían a otros atletas (Navarra) y se ahorrarían el viaje.
Estoy hablando de los hombres, porque para las mujeres estoy convencido de que es mucho mejor correr la Carrera de Primavera que los 10 K de Laredo. ¿Por qué? En Laredo una mujer de 31', 32', 33', 34', 35', 36'... que es élite o la roza, pasa totalmente desapercibida en medio de centenares de atletas. En Donostia, tendría grupo para correr, sin agobios, con espacio, con liebres tácitas y con un gran protagonismo.
También ayudaría, quizá, retrasar la carrera una semana para no coincidir con Laredo... y para estar más en sintonía con el nombre con el que los Donostiarrak bautizaron la prueba.
El año que viene es la edición número 20 y se me ocurre esta reflexión de Thomas Fuller: 'El buen arquero no es juzgado por sus flechas, sino por su puntería.'
Puede ser un buen momento para enriquecer un palmarés, que cuenta con los mejores fondistas gipuzkoanos de lo que llevamos de siglo.
Rula en todos los depor informativos que Kortazar ha batido el récord de la prueba ( creo q se copian ) , pero como bien pones en tu cuadro de historial lo tendría aún Iratxe Aranburu desde el 2004
ResponderEliminarA lo mejor quienes defienden el récord de Oihana Kortazar lo hacen porque la carrera de este año estaba homologada y en 2004 no.
EliminarTambién lo he pensado
ResponderEliminarGracias por la respuesta y tu maravilloso blog
Eskerrik asko!!!!
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