Será la tarde del 3 de junio, por el recorrido habitual, que vemos en el cartel, y acabará con el espléndido avituallamiento que se ofrece a los participantes y un concierto a cargo de los grupos Tross eta Petri.
No es un fenómeno social, como la B/SS. No tiene la épica del Maratón. Las distancias, 6 y 3 kilómetros, no están homologadas. No tiene la tradición y la solera de Idiazabal o Andoain. Pero tiene su propia personalidad, que merece la pena conocer y disfrutar.
Con salida y llegada en la Avenida de Isabel II, el circuito recorre parte de Amara Berri, el Paseo Zorroaga, el Parque de la Memoria y la Avenida de Barcelona, en Riberas de Loiola. Aunque es bastante llano y con largas avenidas, tiene sus tachuelas y hasta hay terrero para las emboscadas. Serán dos vueltas, sumando 6 kilómetros. Los que salgan a correr a tope, se tendrán que emplear a fondo. Los que salgan a disfrutar de la carrera tendrán ocasión de hacerlo.
En su palmarés encontramos ganadores del nivel de Pablo Salaverría (2015) o Aitor Etxeberria (2022).
También hay la opción de carrera de 3 kilómetros, a una sola vuelta,
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