martes, 30 de abril de 2013

Hoy cumplo un año

Hoy hace justo un año, nació este blog, que estrené con un post, al que le puse un título absolutamente previsible: Mi primer postA ese primer post, le han seguido otros 92, repartidos así:

Decía entonces que hablaría de 'salud, dinero y amor', y lo cierto es que también he abordado otros temas, como las películas, que he visto, los libros que he leído, alguna incursión musical y alguna aproximación a temas de actualidad, en los que he tratado de dar una opinión constructiva

He hablado, sobre todo, de deporte y, por concretar, de atletismo, en su vertiente más popular. Han sido los más celebrados y los que más visitas han recibido. Los juegos olímpicos de Londres me dieron la oportunidad de dar mi versión de la mejor carrera de la historia en la distancia de 800 metros: Me quedo con Rudisha. Es un post que me curré mucho y que os invito a releer con la perspectiva que da el tiempo.

En este año, he recibido 8.265 visitas, repartidas mes a mes como podéis ver en el gráfico. Para tratarse del primer año, estoy contento; más aún si vemos la evolución que, se observa en ese gráfico.

Los cinco más visitados han sido:
  1. Suerte en Viena, Juan Carlos, que debo a la generosidad de Juan Carlos Arregui.
  2. Cuenta conmigo, que nació de la felicitación que me mandó mi hija el día del padre.
  3. Algo más que un gesto, en el que me limité a recoger lo publicado en la prensa del Cross de Burlada, en el que el atleta vitoriano Iván Fernández demostró su fair play
  4. Hugo Chávez: ¿bueno, feo o malo?, extractado de lo publicado en la prensa a raíz del fallecimiento del caudillo venezolano.
  5. Haikus en mi twitter, que sería el único de los cinco verdaderamente original y que ha tenido una aceptación que nunca hubiera esperado. Y mira que son malos mis haikus ¿eh?. Por cierto, mi cuenta en twitter es @GabrielBelda.
Bueno, no me enrollo más. Muchas gracias por estar ahí, por leerme, y por darme vuestro feedback, por los comentarios en el blog, por e-mail, por teléfono, en facebook, en twitter o en persona.

Y para no defraudaros, terminaré, también hoy, con una cita. La de hoy es de Bertolt Brecht, es una de mis favoritas y viene al pelo para los tiempos que corren:

Hay hombres que luchan un día y son buenos. Hay otros que luchan un año y son mejores. Hay quienes luchan muchos años, y son muy buenos. Pero hay los que luchan toda la vida, esos son los imprescindibles.

domingo, 28 de abril de 2013

Sudur Krossa 2013. Iñigo en el top ten

FotografíaEl retraso en la publicación de las clasificaciones es la causa de que este post -que escribo desde Düsseldorf- pierda actualidad, ya que se refiere al Sudur Krossa que se celebró el pasado 13 de abril.

Viendo el magnífico reportaje fotográfico de Luis Peralta, siento no haber sido de la partida, pues la dureza del circuito y el calor quedan sobradamente compensados por la belleza de las imágenes.

La noticia, para mí, fue la magnífica carrera de Iñigo Beldarrain, que es el atleta de negro con el dorsal 689, que fue el 8º entre los 221 atletas clasificados. Es la primera vez que se mete en el top ten... y espero que no sea la última. 

Por lo que me cuentan, hizo una carrera de atrás adelante, ganando posiciones a medida que avanzaba la carrera. Terminó justito de fuerzas y muy contento por el resultado, que superaba sus expectativas.

La carrera fue para el más que prolífico -y magnífico- competidor que es Ibai Alba, a quien podéis ver en la foto, con el dorsal 671, negociando la curva más complicada del recorrido. Sin dejar de entrenar a tope y casi a diario, compite todos los fines de semana, llegando a doblar y siempre entre los mejores, cuando no es el mejor, como en esta ocasión. 

En esa misma curva podéis ver también a Iñigo, cuya prioridad, ahora mismo, son los estudios y que, para lo poco que entrena, está consiguiendo buenos resultados y mejores tiempos. Con su edad y su amplísimo margen de mejora, seguro que empiezan a caer los tiempos de su padre.

Y para cerrar este post otra magnífica foto del 5º clasificado, Xabier Erentxun (dorsal 626), que debemos al arte de Luis Peralta. El depurado estilo de Xabi también ayuda ¿eh?

Tomad buena nota de esa dirección: http://luisperaltafoto.com/ y deleitaos con las fotos de Luis, que, como veis, le pega a todo.

FotografíaLa mayoría de las carreras que se celebran en Donostia, todo tipo de actividades al aire libre, empezando por la Tamborrada, siguiendo por el Festival de Jazz, etc. podéis verlas en esas fotos.

También tiene un amplio catálogo de fotos de los Campeonatos de Europa de Atletismo en Pista Cubierta para Veteranos, celebrados en Donostia el pasado mes de marzo. Hay muchísimas, de toda clase de pruebas y de todo tipo de atletas, empezando por los nuestros. Merece la pena, de verdad, dedicarle unos minutos.

Porque son fotos en las que, de repente, Luis consigue parar el tiempo; ese tiempo que, en palabras de Platón, es una imagen móvil de la eternidad.

Disfrutad con ellas, como yo he disfrutado con la carrera de mi hijo.














viernes, 26 de abril de 2013

Banqueros, bancarios y personas


Entrada de la calle Azkuene
En 1978, cerca de cumplir 23 años, empecé a trabajar en la sucursal de Azkuene de la Caja de Ahorros  Municipal de San Sebastián. Eran otros tiempos. No teníamos ordenadores y apuntábamos a mano en las libretas las imposiciones (ingresos) y los reintegros (sacar dinero) de los clientes. Les llamábamos por su nombre y hasta nos sabíamos de memoria sus números de cuenta. Yo todavía recuerdo media docena de aquellas cuentas.

Conocíamos a todo el barrio, y todo el barrio sabía que podía confiar en nosotros para gestionar sus ahorros. Estábamos al lado de los comercios y empezábamos a financiar a las pymes. Los préstamos se pedían casi a escondidas (yo me enteré que mis padres tenían un préstamo hipotecario para financiar la compra del piso, donde vivíamos desde hacía 8 años, en el momento en el que entre a trabajar en la Caja); y aunque los tipos de interés eran altos, casi todos se pagaban antes de su vencimiento. La inflación, en ese caso, ayudaba. 

La 'Oficina' se percibía como un motor para el crecimiento del barrio, un centro de negocios de andar por casa, que hacía posible que muchos otros negocios mejoraran la vida de la gente. Se captaban recursos a un precio rezonable, con productos poco sofisticados, que podías explicar a un niño de 10 años. Y esos recursos se destinaban a financiar la compra de viviendas o locales comerciales, reformas en casa, coches, circulante para los comercios y las pymes, instalaciones... Se valoraba la capacidad de ahorro, la solvencia y la 'moralidad' de las personas y nunca se financiaba más allá de un procentaje razonable del total de la inversión; nunca se llegaba al 100% y rara vez al 80%. 

Poco a poco, fuimos cambiando. La informática nos ayudó muchísimo. Ya no teníamos que memorizar tantos números de cuenta. Los cajeros automáticos, primero, internet, más tarde, nos  permitieron disminuir el trabajo más rutinario y repetitivo de las oficinas. Los clientes podían operar con nosotros 24 horas al día, 365 días al año. ¡Qué bien!. ¡Teníamos más tiempo para atenderles mejor!

Empezamos a dar más importancia al marketing, a hacer encuestas, a preocuparnos por la calidad. Diseñamos sofistacadas herramientas de análisis y empezamos a comercializar productos financieros que no podías explicar a un niño de 10 años y mucho menos a sus abuelos, que los seguían contratando porque se fiaban de nosotros. Los tipos de interés bajaron muchísimo y nos metimos en inversiones de más riesgo, en vez 'poner el pie allá donde pisa del buey' y 'no poner todos los huevos en la misma cesta', como decía un director financiero, jubilado hace muchos años.

Y así, nos despertamos un día, teniendo que dotar (echar a pérdidas en román paladino) esa faraónicas inversiones y, lo que es mucho más grave, empezando a notar que nuestros clientes, aquellos niños de 10 años, que ya tenían 30 ó 40 y que lo estaban pasando mal por la crisis, la falta de trabajo, la caída de las ventas... ya no confiaban en nosotros como confiaban sus padres o sus abuelos. ¡Y menos mal que nosotros no vendíamos preferentes! 

Mientras tanto, los primeros ejecutivos de los banco se autoasignan unas remuneraciones multimillonarios y obscenas; y a ningún alto directivo de los bancos y cajas en crisis se le piden cuentas de los desmanes cometidos; bien el contrario, se les  premia con jugosas indemnizaciones. 

Y ¡claro! en este clima social no es extrano que a los bancarios, a los profesionales de la banca, a los que todavía no nos han prejubilado o nos han  aplicado un ERE (el sector financiero está sufriendo una durísima reconversión), nos confundan con los banqueros. A nosotros, que nos hemos sentido útiles, que hemos empatizado con nuestros clientes, que hemos contribuido a hacer realidad sus sueños: casarse, formar un hogar, emprender un negocio, disfrutar de una mayor calidad de vida y hasta de algún capricho... y que hemos disfrutado con ello.

Me gustaría pensar esto se puede remediar. Que las personas pueden volver a confiar en la personas. Que conseguir una rentabilidad exagerada es menos importante que tener garantizada la seguridad de nuestros ahorros. Que no parece muy razonable pedir un préstamo para irse de vacaciones a Punta Cana o para pagar la comunión de la niña. Que las inversiones especulativas están reñidas con aquellas que impulsan proyectos y empresas, viables, solventes y rentables, con un impacto positivo en la sociedad y el medio ambiente. Que no es lo mismo que los beneficios de un banco vayan a las cuentas que sus altos directivos pueden tener en paraisos fiscales a que, gracias a esos beneficios, podamos disfrutar de una mejor asistencia socio-sanitaria, impulsar la investigación y la innovación o fomentar la cultura.

Como ejemplo de cómo se puede hacer una banca más humana, os dejo esta noticia:

Kutxabank ayuda a los afectados en Bermeo

El pasado 11 de abril, un incendio en el casco viejo de Bermeo provocó el derrumbe de cinco edificios y daños a otros inmuebles de los alrededores. Se estima que unas 70 personas han tenido que ser realojadas al no poder volver a sus casas.

Siendo fiel al compromiso con nuestros clientes, Kutxabank ha adoptado medidas financieras concretas para apoyar a las familias clientes afectadas por este devastador incendio.

Los empleados de las tres oficinas ubicadas en el municipio de Bermeo, conjuntamente con la dirección de zona Durango-Gernika, el área de Marketing y Kutxabank Seguros, han trabajado en equipo para ofrecer a nuestros clientes estas medidas de apoyo. Un total de 16 familias se han podido beneficiar de ellas.

En este proceso, ha sido muy importante el apoyo recibido por el equipo de técnicos de Kutxabank Seguros, que desde el pasado viernes se han desplazado a Bermeo para asesorar más directamente en todas las gestiones con los clientes, continuando con dicha labor a fecha de hoy.

La acogida entre las familias clientes afectadas ha sido extraordinaria. Valoran el esfuerzo de Kutxabank al estar a su lado, con este apoyo financiero y con la atención profesional recibida por todas las personas de Kutxabank que se han visto implicadas en las distintas acciones que se han puesto en marcha. 

Noticias como esta me hacen pensar que estamos en el buen camino porque, como decía Oliver Wendell Holmes'Lo que haces habla tan alto que no me deja escuchar lo que dices'.

miércoles, 24 de abril de 2013

Calidad empieza con C de CLIENTE

'Todo necio confunde valor con precio' (Antonio Machado)

Durante media docena de años he tenido responsabilidades profesionales en el ámbito de la calidad, un concepto que siempre he asociado al cliente, cuya opinión y/o percepción es el atributo principal que determinará la posición de una empresa y/o una marca en el largo plazo.

Es decir, la calidad es un concepto íntimamente ligado al servicio y al largo plazo. Sin embargo, asistimos -yo verdaderamente atónito- a una permanente degradación de todo tipo de servicios y a una orientación rabiosamente cortoplacista de las estrategias de marketing.

Si Deming levantara la cabeza...

Tanto la investigación académica como la práctica empresarial demuestran empíricamente, por la vía de los hechos, que un un elevado nivel de calidad de servicio mejora la cuota de mercado de las empresas, la motivación y la productividad de sus profesionales, la lealtad y la prescripción de sus clientes y la diferenciación respecto de la competencia.

Ahora bien: ¿Cómo se mide la calidad? O, retomando un ejemplo que utilizaba yo para suscitar el debate: ¿Qué tiene más calidad: un trapito de Zara o modelazo de Armani? Pues depende. ¿De qué depende? (no estoy cantando ¿eh?). Depende de los requisitos del cliente y de la diferencia, positiva o negativa, entre el servicio esperado y el servicio percibido por el cliente. ¿Entendéis ahora lo de Zara y Armani?

Y para no enrollarme, para que cada uno de nosotros mida la calidad de los servicios que recibe, por los que paga un dinero, debemos fijarnos en estas 5 dimensiones:
  • Elementos tangibles: Todo lo que es físico. Instalaciones, Equipos, Empleados, materiales utilizados en la comunicacion...
  • Fiabilidad: Prestar el servicio prometido de forma precisa. De esto podríamos hablar y no parar ¿verdad?
  • Capacidad de respuesta: Deseo de ayudar a los clientes y servirles de forma rápida. ¿Cómo lo veis?
  • Seguridad: Conocimiento del servicio prestado, profesionalidad de los empleados y su capacidad de transmitir confianza al cliente.
  • Empatía: Ponerlos en los zapatos del cliente. Hacerle sentir que recibe un servicio personalizado. No es tan difícil ¿eh? 
Y todos estos requisitos tienen mucho más que ver con el 'valor' que con el 'precio'. De ahí que empezara este post con esa cita de Antonio Machado.

lunes, 22 de abril de 2013

Boston Marathon: ¿Para cuándo la peli?

El lunes a la noche, mientras empezaba a leer 'Muerte blanca' (ver post del 21 de abril), recibí varios whatsapps, que me informaban de las dos bombas colocadas en la llegada del maratón de Boston y de los primeros datos de la tragedia. A las 22:30 apagué el móvil.

El etíope Lelisa Desisa, fue el vencedor
Desde entonces, nos han bombardeado con los detalles del atentado, la investigación, la identificación de los supuestos autores -dos hermanos de origen checheno y practicantes del islam- su persecución y, por fin, la muerte de uno de ellos y el arresto, malherido, del otro.

Tres muertos, múltiples mutilados y una cuidad en estado de sitio mientras todo un ejército de miles de policías, armados hasta los dientes, buscaba a un joven de 19 años.

Imágenes inquietantes que nos acercan al aterrador universo descrito por Orwell en '1984', que empieza a hacerse normal en nuestra sociedad, en la que un 'Gran Hermano' nos vigila constantemente. Y nos embauca con el señuelo de la seguridad total para, poco a poco, ir mimando nuestras libertades.

Porque la seguridad total no existe. Nadie puede garantizarla. Está el azar y están los locos que, por cierto, son multitud en los Estados Unidos. Deberían hacérselo mirar.

Mientras tanto, el maratón más antiguo del mundo, el primero en el que corrió una mujer, el de la célebre Heartbreak Hill entre los kilómetros 32 y 34, el del dominio total de los atletas kenianos, será conocido en adelante como aquel en el que los hermanos Tsarnaev mataron a tres personas y sembraron el terror en una cuidad y en todo un país. 

Yo no quiero vivir en un país así y no quiero que me impongan ese modelo, por muy cinematográfico que resulte. Seguro que en un par de años tenemos en nuestras pantallas una peli que nos cuente la caza de los hermanos Tsarnaev, como este año, en La noche más oscura, nos han contado la caza de Bil Laden.

Para terminar, os dejo un par de frases de 1984. A ver qué os sugieren:
  • Cada año habrá menos palabras, así el radio de acción de la conciencia será cada vez más pequeño.
  • La guerra es la paz. La libertad es la esclavitud. La ignorancia es la fuerza.