Siendo impactante la noticia, me sorprende que merezca la apertura del informativo de mayor audiencia, mientras en el Mediterráneo sigue muriendo gente anónima, mientras aumentan el paro y la
desigualdad, mientras en casi todo el mundo se violan sistemáticamente los derechos humanos, mientras decenas de miles de cristianos son asesinados cada año sólo por el hecho de serlo… o mientras a Trillo y a Martínez Pujalte les parece legal cobrar 354.000
y 75.000 €, respectivamente, por ‘asesorías orales’ facturadas a una empresa constructora por sus despachos profesionales cuando eran diputados en el Congreso.
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-‘el puñetazo en el estómago’ que diría Hemingway- y a él sacrificamos todo lo demás, pero nadie le devolverá la vida a Lorca. Y si seguimos así, seguirán muriendo personas inocentes, muchos jóvenes y menos jóvenes seguirán sin poder trabajar o con
contratos precarios… y Federico Trillo-Figueroa y Martínez-Conde seguirá siendo embajador de España en Londres y Vicente Martínez Pujalte –que tiene el dudoso honor de ser el primer diputado en ser expulsado del Congreso, al que llegó en 1993- seguirá calentando
su escaño... y facturando.
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