El termómetro marcaba cuatro grados y la mañana se adivinaba estupenda, con el cielo azul adornado por unas pocas nubes de algodón.
Por primera vez compareció Unai San Sebastián, que llegó a la vez que yo. Mientras esperábamos al resto, estuvimos haciendo unas rectas para combatir el frío. Javier Colomo, Gorka Pike y JuanCar Arregi llegaron a la hora y tras esperar tres o cuatro minutos nos pusimos en marcha.
Aguanté con ellos hasta el Náutico, apenas 900 metros, y les dejé ir. Yo rodaba a 5:00 y ellos iban más rápido. Aunque fui aumentando el ritmo muy poco a poco, la distancia que me separaba del cuarteto no dejaba de crecer y no tardé en perderles de vista.
Por el túnel del Antiguo me crucé con Ibon Esparza y Alberto Manzanares; y por la Avenida de Tolosa a Emi Cajete y Arkaitz Aginagalde, que libraban su particular desafío, acompañados, protegidos, animados y controlados por Iulen Ibáñez, Norman Cuenca y Hoki Guerrero montados en sus bicis.
Ya por Ibaeta-Igara, mientras yo iba, en la rotonda de la Cadena Ser me crucé con Javier Colomo, Gorka Pike y JuanCar Arregi, que volvían. Un poco más adelante, me encontré con Unai San Sebastián, que como buen samaritano giró sobre sus pasos y me acompañó los cinco kilómetros y pico que faltaban para completar el recorrido.
Agradecí esa compañía, que me permitió acelerar un poco y darle al cuerpo un calentón tan imprevisto como bien recibido. Lo que cuesta volver a correr a esos ritmos...
El trío de cabeza nos esperó para sacarnos la foto de rigor, que acompaña este post.
La próxima cita, el domingo 28 de marzo, a las 8:00, en Bataplán.
No hay comentarios:
Publicar un comentario