Aparcamos por un día el atletismo para volver a la literatura.
También por mi cumpleaños me regalaron Pan, educación, libertad, novela policíaca del escritor griego Petros Márkaris, publicada en 2013, ambientada en los comienzo de 2014, en una Grecia en quiebra, que sale del euro y vuelve al dracma.
El comisario Kostas Jaritos, como cualquier otra persona de la clase media, sufre en sus propias cranes y en las de su familia el empobreciento económico y moral de un país, en el que las protestas se multiplican como champiñones, mientras la violenta amenaza neonazi va tomando cuerpo y sólo algunas tímidas iniciativas solidarias de los jóvenes alumbran un panorama desolador.
En ese marco, el comisario Jaritos y su diezmado grupo de ayudantes, deberá esclarecer el asesinato de un rico contratista de obras, que 40 años antes participó en la rebelión de los estudiantes contra la dictadura militar de los coroneles.
A través de las 253 páginas de la novela, que despaché en mi último viaje a Cordoba, asistimos como espectadores a la decadencia de un país, traicionado por la clase empresarial, sindical, universitaria y política, entre la que se tendrá que mover el comisario, mientras un teléfono móvil, en el bolsillo de los muertos va reclamando, sucesivamente, pan, educación y libertad.
No será lo último que lea de Petros Markaris.
Eskerrik asko! Amaia.
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