viernes, 11 de octubre de 2013

Lo que no puede ser, no puede ser...

... y además es imposible.

Incorrectamente atribuida al torero Guerrita, la frase 'lo que no puede ser, no puede ser y además es imposible' ilustra perfecta-mente el despropósito que pretende imponer el Ayuntamiento de Fuengi-rola en la Feria del Rosario, del que se han hecho eco todos los medios. Repro-duzco la noticia publicada en El Mundo: 

'El Ayuntamiento del municipio malagueño de Fuengirola solamente permite música interpretada en español en las casetas de la Feria que se celebra estos días en honor a la Virgen del Rosario. "Bajo ningún concepto se permitirá la ambientación musical con géneros como funk, rap, reggaeton, electrónica, metal, alternativa, hip hop, reggae, heavy metal, country, punk, gótica y ritmos latinos en general.'

Es como querer poner puertas al campo o exigir de los demás comportamientos que no están bajo nuestro control. ¿Cuántas veces, con el poder -que no la autoridad, que es otra cosa- que nos concede nuestro rol de padres o de jefes hemos impuesto prohibiciones que atentan a la libertad individual y hasta al sentido común de quienes se supone que nos tienen que obedecer? ¿Somos conscientes, cuando lo hacemos, de que, a cambio de reforzar nuestro poder, estamos poniendo en cuestión nuestra autoridad?

Volviendo a Guerrita, cuentan que, en una ocasión le preguntó a Ortega y Gasset qué era él. Ortega le dijo que era filósofo y la réplica del torero fue otra de sus frases célebres: 'Hay gente p'a tó'; que le va al pelo a la alcaldesa de Fuengirola.

Dejemos pues de prohibir cosas absurdas, porque, volviendo a Guerrita: 'Ca uno es ca uno'.  


No hay comentarios:

Publicar un comentario