Mañana 30 de julio, a las 20:30 hora local, se dará la salida en el estadio olímpico de Tokyo a la primera final del programa de atletismo de los XXXII Juegos Olímpicos de la Edad Moderna.
Será la final de 10.000 metros masculinos, final directa, con 25 atletas en liza. Tres atletas de Uganda, Ethiopia, Kenia y USA. Dos atletas de Japón y Gran Bretaña. Y un atleta de Eritrea, Bélgica, Canadá, Tailandia, Francia, Italia, Suiza, Australia y España, Carlos Mayo, con una mejor marca de 27:25.00, la cuarta peor de los 25.
Todos bajan de 27:30 y nada menos que 8 tienen marcas por debajo de 27:00. Son éstos:
Tres atletas de Ethiiopia, dos de Uganda, otros dos de Kenia y un canadiense.
Hace un año, cuando batió el record del mundo en Valencia, en aquella carrera con las lucecitas en la pista haciendo de liebre, hubiera apostado por Cheptegei (en la foto de arriba), que este año no ha corrido ningún 10.000 y cuya mejor carrera es un 5.000 en 12:54.69, el 10 de junio en Florencia. Acabó sexto; ganó Jakob Ingebrigtsen (12:48.45, record de Europa) y Mohamed Katir fue cuarto con 12:50.79, record de España).
La mejor marca de este año corresponde a su compatriota Jakob Kiplimo, el pasado 19 de mayo en Ostrava: 26:33.93.
Los otros seis están en un pañuelo y son durísimos rivales.
¿Por quién apostáis? Yo me voy a tirar a la piscina y apuesto por Barega, a quien vemos en la foto de Felix Sánchez Arrazola cuando ganó el Cross de Elgoibar de 2018. Esa foto fue premiada como la mejor del año.
Nuestro admirado Felix ya está en Tokyo y nosotros a la espera de su arte y de su magia.
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