Si alguna vez -Dios no lo quiera- necesito un abogado penalista, y lo puedo pagar, es probable que elija a Javier Melero, defensor de Joaquim Forn en el juicio del procés, y autor de El encargo, un libro que cuenta todo aquello que se puede contar sin atentar al secreto profesional y sin repetir lo que vimos por la televisión, escuchamos por la radio o leímos en los medios, de un juicio mediático y, a mi modo de ver, político.
Lo primero que llama la atención es el personaje que se adivina o se intuye detrás de la, siempre en mi modo de ver, deliberadamente descuidada imagen de sí mismo que transmite Javier Melero, Un tipo que pudo estar en la génesis de Cuidadamos (pero que carga sin piedad contra Albert Ribera), que no es nacionalista catalán y mucho menos independentista, pero se confiesa amigo personal de Jordi Pujol, y ha tenido entre sus clientes a Oriol Pujol, Artur Mas, el propio Joaquim Forn y otros políticos de Convergencia y sus sucesivas marcas.
Cultivando los 4 Hs: humildad, humanidad, honestidad y humor, describe a los personajes de la trama: jueces, fiscales, abogados defensores, abogados de la acusación particular, el Estado, los juzgados y otros colaterales, desde Puigdemont y Torra a Felipe VI, haciendo descripciones detalladas de su aspecto físico, su forma de vestir, su edad, su manera de comportarse. Son todas ellas magníficas, con las dosis justas de ironía y bondad.
Aficionado y practicante del boxeo, inicia cada capítulo con alguna cita de algunos mitos de este deporte. Cuenta el desarrollo de los acontecimientos previos al juicio y su desarrollo, desde la más estricta ortodoxia técnica: 'Yo no represento a ningún colectivo, ni a ningún Govern, ni a ningún pueblo. Soy un abogado.'
Es el relato de un abogado en el juicio del procés -y mucho más- contado en 350 páginas que se pueden leer de un tirón y que os recomiendo.
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