'Vuelve el caldo Aneto, vuelve la normalidad de las carreras populares. Así de claro te lo digo y así creo que ha sido la sensación generalizada, una alegría colectiva digna de la noche de Reyes / Tió / Papa Noel. Y es que con este Tast de la Mitja ya se vislumbra la salida del túnel de la pandemia en cuanto a los eventos populares deportivos en entornos urbanos. Aún queda camino por recorrer, aún cosas por perfilar, pero creo que es una experiencia muy positiva y un buen banco de pruebas de lo que se viene encima (en pocas semanas la Mitja de Granollers, aunque antes en el asfalto hay dos citas estupendas como son el Cros de Sants y la Delta Prat).'
Vamos, que en Catalunya ya se puede participar con garantías en una carrera popular, mientras que aquí ni siquiera podemos asistir como espectadores, en un espacio abierto, a las competiciones que están organizando la G.A.F. y la E.A.F., como, por ejemplo, la de mañana en Ordizia.
Hasta allí se fueron tres atletas que he localizado entre los primeros de la clasificación, que lidera nada menos que Ayad Lamdassen (29:22). Aitor Mimenza fue séptimo (30:21) y Alexander Oiarbide undécimo (30:44), en una carrera de gran nivel. Les vemos en la foto del grupo de cabeza.
Toni Bautista, que es catalán, pero tiene un punto de vasco, fue 34º con 33:01.
Y mención especial para un paradigma del atleta popular: Emi Cajete, que llegó en el puesto 110º, haciendo marca personal: 35:51, finalizando fortísimo, tras pasar por el ecuador de la carrera en 18:23.
¡Qué envidia me dan los catalanes!
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