El pasado 25 de julio hablábamos de los atletas españoles (hombres) que iban a competir en los JJ OO de Tokyo y de sus posibilidades. Era una relación de 31 atletas, en la que repetía Carlos Mayo en 5.000 y 10.000 metros y en la que única medalla probable era la de Orlando Ortega (de origen cubano), segundo en el ranking WA de los 110 metros vallas.
Las finales estaban muy caras y a los diplomas olímpicos podían aspirar los marchadores Alvaro Martín y Diego García, Mohamed Katir (5.000), Javier Cienfuegos (Martillo) y quizá Eusebio Cáceres (Longitud).
Al lesionarse Orlando Ortega, se esfumaban las posibilidades creíbles de medalla.
A cambio, sólo entre los hombres, España sumó 9 finalistas.
Eusebio Cáceres, en su mejor concurso de los últimos años, estuvo muy cerca de la medalla de bronce en el salto de longitud, de la que le privó el griego Miltiadis Tentoglou en su último intento.
También en los últimos cien metros perdió la medalla de bronce Marc Tur en los 50 kilómetros marcha.
Y la tercera medalla de hojalata fue para el marchador Alvaro Martín en los 20 kilómetros.
Adrián Ben corrió muy bien en series, semifinales y final de 800 metros ante atletas con marcas y palmarés mucho mejores que él. Terminó quinto.
También fue quinto Adel Mechaal en la final más rápida de los 1.500 metros de la historia de los JJ OO, mejorando por dos veces su marca personal.
Y Ayad Lamdassen terminó quinto en un maratón durísimo, con nueve atletas con marcas por debajo de 2h:05', perdiendo la medalla de bronce en los últimos quinientos metros.
El sexto puesto del navarro Asier Martínez en los 110 metros vallas es una de las mayores sorpresas y esperanzas del atletismo español. Sin arrugarse ante sus rivales, mejoró por dos veces su marca personal.
También fue sexto el marchador Diego Martín en los 20 kilómetros.
Y cierra la relación de finalistas Mohamed Katir, octavo en una carísima final de 5.000 metros. La marca con la que llegaba y su comportamiento en las semifinales nos hicieron soñar, pero en la final se dio un baño de realidad. Dice un amigo mío que o se gana o se aprende. Espero que Katir haya aprendido la lección.
Y aunque se quedó sin diploma olímpico, el decatleta Jorge Ureña hizo un gran concurso, mejorando su marca personal y acabando noveno.
El relevo mixto de 4x400, que se clasificó décimo, compitió muy bien.
Décimo fue también Javier Cienfuegos, que partía séptimo en el ranking WA de lanzamiento de disco.
Y podemos calificar de notable la actuación de Ignacio Fontes, 13º en la final de los 1.500 y Carlos Mayo, también 13º en la de 10.000 metros.
El único atleta gipuzkoano presente en Tokyo 2020 fue Odei Jainaga. Compitió mermado en la calificación del lanzamiento de jabalina, lanzando muy por debajo de su capacidad. Es un atleta joven, con un enorme potencial, castigado por las lesiones, que están dificultando la progresión que muchos le adivinamos y le deseamos.
En el cuadro que sigue, vemos a los atletas españoles (hombres) que compitieron en Tokyo, con sus resultados y las marcas con las que llegaban a la XXXII olimpiada de la era moderna.
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