Y a sólo 7 centímetros de su propio record mundial (22.37) conseguido en los Trials USA. Es evidente que se trata de un gran competidor. Repite su victoria de Río 2016.
Desde su primer salto (22.83) Ryan Crouser (USA) ha liderado la competición. Ha mejorado en el segundo (22.93) y ha estado cerca en el tercero (22.86). El cuarto (22.74) y el quinto (22.54) han sido un poco más cortos. En el sexto, ya campeón olímpico, se ha ido hasta 23.30.
Segundo ha sido Joe Kovacs (USA) con un mejor lanzamiento de 22.65 y una serie espectacular: 22.19, 20,95, 21.95, 22.65, 22.29 y 22.60. Doble campeón mundial en 2015 y 2019, repite la plata de Río 2016.
El neozelandés Tomas Walsh, otro gran competidor, se ha llevado la medalla de bronce con 22.47 en su sexto intento. Esta ha sido su serie: 21.09, 22.17, nulo, 21.37, 22.18 y 22.47. También fue tercero en Tokyo y fue campeón del mundo en 2017.
Estos tres colosos, de 28, 32 y 29 años, llevan más de un lustro dominando el lanzamiento de peso, una especialidad, para mí, espectacular, en la que resulta casi milagroso que semejantes moles sean capaces de moverse y de girar con una plasticidad y una coordinación asombrosas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario