Eva Esnaola, una mujer de hierro

Aunque nadie lo diría, cumplió 60 años el pasado 23 de noviembre de 2020. Hace tres años, el 12 de mayo de 2018, en la pista de Ordizia, a la que dio 125 vueltas, corrió 50 kilómetros en 3:53:30, marca homologada por los jueces, que es record del mundo de la distancia para mujeres mayores de 55 años.

El pasado 8 de mayo, en Burjasot, estableció una mejor marca mundial en la categoría W60, corriendo en 12 horas 124.495,85 metros. El paso por los 100 kilómetros lo hizo en 9:21:37, que es record de España.

Con estos antecedentes y con seis atletas que le acompañaban, además de los jueces, y -¡cómo no!- su inseparable hermana y manager, Idoia, Eva Esnaola se presentó el sábado en la pista de Ordizia, dispuesta a mejorar el vigente record de España de maratón W60, en posesión de Emilia Vaquero, conseguido en Sevilla el año 2011: 3:18:23.

Se trataba de dar 105,49 vueltas a la pista azul de Altamira. Y dar cada una de esas vueltas por debajo de 1':53". Salió una mañana fría y lluviosa, que no ayudaba al objetivo. Luego sabremos por qué.

Hoki Guerrero, que volvía a correr tras una larga lesión, fue la primera en parar. Lo hizo a los 11 kilómetros, tras pasar los 5 en 23':17" (1:52 la vuelta) y los 10 en 46':37", a 1':52" la vuelta, como un reloj suizo.

La siguiente en echar el freno fue Nere Arregi, otra que anda renqueante, tras pasar por el kilómetro 15 en 1:10:11. Seguían a 1:52 cada vuelta.

Izaro Rubio, que también se animó, iba por delante, con Fidel Pérez. Pasaron el kilómetro 5 en 20:30, el 10 en 41:16 y el 15 en 1:02:07. Ahí se quedó Izaro.

Eva, acompañada por Alazne Mujika, seguía a lo suyo, pasando el kilómetro 20 en 1:33:45 y el medio maratón en 1:38:54, dentro del objetivo, que daría un tiempo final de 3:17:48.

Fidel pasaba por el ecuador de la carrera en 1:27:55 y Aitziber Martín, a la que no hemos mencionado todavía, lo hacía en 1:29:42.

Eva y Alazne pasaban por el kilómetro 25 en 1:57:11. Llevaban 62,5 vueltas a un ritmo medio de 1:52 cada vuelta. Ya digo, como un reloj suizo.

Aitziber llegaba hasta el kilómetro 30, que liquidaba en 2:08:28, a 4:17/km.

Por su parte, Alazne y Eva pasaban ese kilómetro 30 en 2:20:27. Seguían a 1:52 cada vuelta.

Entre los kilómetros 30 y 35 surgió la complicación, no por previsible, menos cruel. El punto débil, el talón de Aquiles de esta mujer de hierro que es Eva Esnaola, son sus tripas, que protestan y exigen evacuar en pleno esfuerzo. Esa necesidad se acentúa en ambientes fríos y húmedos, como los del sábado. Esa parada para evacuar le costó a Eva apenas minuto y medio. 

Alazne pasaba el kilómetro 35 en 2:43:53. Seguía a 1:52 cada vuelta. Eva pasaba en 2:45:04, que darían una marca en el entorno de 3:19:00.

Por el kilómetro 40, Alazne pasaba en 3:07:45, dentro del objetivo. Eva lo hacía en 3:08:27, lo que implicaba dar las últimas 5 vueltas y media a 1:48 cada vuelta.

Para entonces, ya había terminado Fidel, en 3:04:47, haciendo la segunda mitad en 1:36:52

Alazne acabó en 3:18:17, cumpliendo el objetivo. Eva paró el crono en 3:19:00, lo que significa que pagó el esfuerzo realizado para recuperar el tiempo perdido con la parada, dando las últimas 5,5 vueltas a un ritmo medio de 1:55 cada una de esas vueltas. Se quedó a 38" de la marca de Emilia Vaquero.

Me pregunto si, además del incidente con sus tripas, pudo influir la proximidad entre los dos retos: 12 horas corriendo el 8 de mayo y un maratón el 22. ¿Le pudo faltar algo de frescura?

Estoy seguro de que tiene esa marca en sus piernas y en que lo volverá a intentar.