martes, 15 de diciembre de 2020

Lo que sí nos gustaría es que nuestros hijos fueran a la escuela

Lo podéis ver en el Facebook de AmigoSolidarios. Está publicado el 10 de diciembre y es una conversación entre Sir Edmund Hillary y Urkien Sherpa. 

En este distópico 2020, en Uganda, en el distrito de Luuka, se ha hecho realidad lo que hace un año podía parecer una utopía: la Escuela Primaria de Namukubembe

Podéis ver varias fotos del antes y el después, que ponen de manifiesto el enorme trabajo realizado por esta modesta ONG, cuya cara más visible es Javier Colomo, formado por personas (de aquí) que ayudan a personas (en Uganda), un grupo independiente, sin ninguna afiliación religiosa, política o gubernamental, que aúna a mucha gente con una gran diversidad de origen, edad, profesión, etc... pero con la misma intención: ayudar.

800 niños se van a beneficiar de esta nueva infraestructura educativa, que a buen seguro devendrá en un aumento de las matriculaciones. 

Y como estos AmigoSolidarios no paran, arrancan con la construcción de otro colegio para 1.200 niños en Kamwirungu.

'El miedo no evita la muerte. El miedo evita la vida.' Con esta cita de Naguib Mahfouz (Premio Nobel de Literatura en 1988) ilustraba Javier Colomo su afán, que le hace seguir buscando charcos que pisar  en los que mancharse los zapatos y poner en marcha una obra tras otra.

Aquí, en España, en Euskadi, las medidas impuestas por las autoridades para ¿combatir? la pandemia del Covid han tenido, entre otros, dos efectos. Por un lado, los más desfavorecidos, se han visto sin empleo, sin ingresos y, en el mejor de los casos, en un ERTE de futuro incierto, algo así como pan para hoy y ¿hambre para mañana?

Por otro lado, quienes formamos parte de lo que un buen amigo define como sociedad instalada: pensionistas, funcionarios y todos aquellos que tienen una fuente de ingresos que no ha sido atacada por esas medidas, al no tener ocasión de consumir (vacaciones, viajes, hostelería, comercio) han visto cómo subían sus ahorros. El Banco de España habla de un incremento de los depósitos superior al 15%, algo que se replica en Europa.

¿Qué podemos hacer con esos ahorros? Con una mínima parte, podemos AYUDAR a los más desfavorecidos. Y les podemos ayudar para que consigan el progreso y el bienestar allí donde viven, sin que tengan que jugarse la vida y la dignidad en Europa, lejos de su tierra y de donde pueden ser verdaderamente felices. 

Entrad en la página web de AmigoSolidarios y veréis con qué poco podemos ser útiles a quienes lo necesitan. 

Repasad las fotos del antes y el después y pensad en el futuro de esos 1.200 niños de Kamwirungu; un futuro que dependen de gente como tú o como yo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario