martes, 7 de diciembre de 2021

Una maleta repleta de ilusión

Vuelve por aquí Imanol González Gete, reciente subcampeón de España de Pista Cubierta en 800 y 1.500 metros en la categoría M40, de cuyas carreras hablamos los pasados 27 y 28 de noviembre.

Y lo hace para rendir un sentido homenaje a su entrenador, Florian García Pavón, un tipo discreto y eficaz, entregado a la causa del atletismo, que además es muy buena gente.

Allá va:

Este texto iba a ser un repaso al pasado Campeonato de España Master, que tuvo lugar en Ourense a finales del pasado noviembre. Pero -no nos vamos a engañar- está todo contado y lo que no lo está, probablemente sea aburrido y... bla bla bla.

Así que haciendo gala de mi gusto por lo políticamente incorrecto y abusando de la confianza de Gabriel, lo que quiero es poner donde corresponde el nombre de Florian García Pavón, el míster.

Flo es un tipo de los que se visten por lo pies, un tío con más clase que un pupitre (como leí una vez a Alberto Arberas), que es todo afición y corazón. Muchos tendréis en la cabeza su imagen dando la salida, pistola en mano, en las pruebas de pista. Os aseguro que más miedo que esa pistola, dan sus whatsapps los domingos a la noche con el plan de la semana.

Más que entrenador, es una persona que entiende al atleta, ya que él nunca ha dejado de serlo por mucho que sus rodillas se empeñen en ello.

Hace siete años, Xabi Erentxun y Jordi Cabestany mediante, acabé entrando en contacto con este hombre, que hizo que me animara a una edad un tanto tardía con esto del atletismo.

Sergio Román, Edu Gallego, Juanlu Gómez, Andoní Olaxa, Marco Rodrigo, Iker Martínez, Eñaut Lasarte, Thom, Hamza…. maratones, entrenos, momentos inolvidables y otros muy malos. Días en que crees sinceramente que todo está perdido y es en aquellos cuando vi que, más que un entrenador, tenía un amigo.

Si tuviera que resumir estos siete años en una palabra, sería compromiso. Es el legado que Mikel Albeniz y su frase lapidaria “si haces caso a Flo, siempre acabas andando”, ha ido pasando de unos a otros; y yo a duras penas intento transmitírselo a Iñigo y a Peru.

Es por eso por lo que el fin de semana del pasado noviembre tuvo algo especial. Y no lo fue por las medallas, ni las marcas, fue por poder ver la cara de un hombre que es todo entrega, que da su sabiduría y tiempo sin pedirte nada a cambio, salvo compromiso.

Gracias Flo, gracias por haber estado ahí siempre, por esas frases al oído (¡no te van a perdonar!), por no mandarme a la mierda cuando he hecho de las mías, por reírte ante mis fantasmadas y compartir tu experiencia.

Pese a ser un atleta veterano, me ha hecho mantener la ilusión y curiosidad de un juvenil, que me hace estar continuamente preguntando a Oskar Ezker, Asier San Sebastián, Iñigo Labat, Aritz López, Imanol Cruz, Carlos Ayala o Alberto Revuelta todas mis dudas.

Si, Alberto Revuelta, al que mando un abrazo desde esta trinchera mediática. Un tipo que siempre ha sido educado y atento conmigo. Con el que he mejorado entrenando y que me ha aconsejado siempre con la mejor de las voluntades. Es fácil dar una palmada en la espalda en los buenos momentos, al igual que es muy fácil hacerse el longuis en los momentos incómodos.

Dicho esto, me despido con una frase que he escuchado hoy y me ha gustado: “La vida es una locura, de ti depende llenarla de ideas e ilusión.”

Comparto ese abrazo y esa actitud ante la vida. Eskerrik asko! Imanol.

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