Garmin de Marco Rodrigo |
'Ayer me tocó ver la carrera desde fuera durante gran parte de ella. Las cosas no salieron como tenía previsto y me paré en el km.4. Andaba con las tripas revueltas todo el día y no estaba disfrutando en carrera. Cómo cuesta arrancarse el dorsal y parar. Esto me dio la oportunidad de disfrutar de una gran carrera y de unos grandes atletas.' Así cuenta Iulen Ibañez en facebook su abandono ayer en la Media Maratón Azkoitia-Azpeitia.
Marco Rodrigo, que además de ser atleta se gana la vida como periodista, en la misma red social, nos daba un titular telegráfico: 'Infierno en el asfalto', resultado de esta ecuación: 'Viento sur y calor + lluvia previa + sale el sol a 5 minutos de la salida + carretera mojada + humedad + salir cómodo a 3.36 y venirte arriba + estar un punto verde = infierno en el asfalto'. Terminó en 1:19:40, como veis en la imagen de la derecha, cuando a 3:36/km. hubiera bajado de 1:16:00.
Creo que me sobran dedos en las dos manos para contar las veces que me he retirado. Y en ninguna de ellas lo he hecho tan pronto y con tanta sangre fría. En los dos maratones que no acabé, los dos últimos (2008 y 2010) lo hice por imposibilidad física de continuar. El dolor era ya insoportable. En el de 2008 debí retirarme mucho antes y en el de 2010 no debí salir. Y el que acabé en 2001 (Leipzig) debí dejarlo en el km. 5.
A por la siguiente, Iulen |
Recuerdo una carrera en pista, un 5.000, en el que alguna parte de mi cuerpo le mandó a mi cerebro alguna señal equívoca que me hizo pararme al paso por los dos mil metros. Iba al límite -¡claro!- y me quedaban diez minutos más de agonía -¡evidente!- pero se ve que aquel día no estaba para sufrir todo lo que hay que sufrir. También me retiré en una Azkoitia-Azpeitia después de que mi hernia de disco L5-S1 me diera un par de avisos.
En todas esas retiradas me he quedado con mal cuerpo y peor conciencia. Y quizá por eso hace mucho tiempo que no me retiro de ninguna carrera. Pero si en el futuro lo tengo que hacer, me gustaría ser yo quien se retire -consciente y voluntariamente, como se retiró ayer Iulen Ibañez- y no que sea la carrera o un impulso eléctrico descontrolado a mi cerebro.
No sé cuántos atletas salieron ayer de Azkoitia. A la meta de Azpeitia llegaron 649. Algunos se quedarían en el camino porque los elementos, como cuenta Marco Rodrigo, se conjuraron para ponérselo difícil. Ánimo a todos ellos, una pronta recuperación y a por la siguiente.
Yo personalmente, anduve con problemas del tendón de Aquiles, y aun así fuimos hasta Azpeitia un amigo y yo. En el calentamiento vimos que no era posible. Un miembro de la organización nos dijo textualmente "una retirad a tiempo, es una victoria" y así lo hicimos. Desde la calle, con mucha envidia e impotencia, disfrute de la carrera.
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