Como veremos más adelante, las marcas están lejos de las que se consiguieron en los JJ OO de Tokyo, algo normal si consideramos que faltaban más de dos meses para esa cita.
Por poner un ejemplo, el campeón olímpico de 200 metros con 19.62, André De Grasse, fue tercero con 20.85. Ganó Kenneth Bednarek (20.33), plata en Tokyo.
Jakob Ingebrigtsen comenzó ganando los 1.500 metros, con una marca discreta para él. Ignacio Fontes fue cuarto con 3:37.97. Adel Mechaal y Ouassin Oumaiz abandonaron.
Mohamed Katir ganó los 5.000 metros con 13:08.52 que en aquel momento era marca personal.
Hillary Bor, que se quedó fuera de la final de Tokyo, ganó los 3.000 obstáculos con una marca discreta. Daniel Arce fue quinto con 8:33.00.
Sam Kendricks ganó el salto con pértiga, derrotando al gran favorito, Armand Duplantis, que se quedó en 5.55. Falló sus dos primeros intentos en 5.74, dejando el tercero para 5.80, altura que no puso saltar.
Filippo Randazzo, octavo en Tokyo, ganó el salto de longitud. Eusebio Cáceres fue segundo con 8.04.
Marcin Krukowki, ausente en Tokyo, ganó el lanzamiento de jabalina con 82.61
Dina Asher-Smith, semifinalista en Tokyo, ganó los 100 metros con 11.35. Shelly-Ann Fraser-Pryce fue cuarta con 11.51.
Kendall Ellis, ausente en Tokyo, ganó los 400 metros con 51.86.
Cindy Sember, semifinalista en Tokyo, ganó los 100 metros vallas con 13.28.
Kamila Likwinko, 11ª en Tokyo, ganó el salto de altura, imponiéndose a Mariya Lasitskene que se quedó en 1.88.
Shanieka Ricketts, cuarta en Tokyo, detrás de Ana Peleteiro, ganó el triple salto con 14.40.
Auriol Dongmo, cuarta en Tokyo, fue la que más lejos lanzó la bala: 19.08.
Mañana nos vamos a Doha.