viernes, 28 de julio de 2017

AmigoSolidarios

El pasado 10 de julio, Javier Colomo me mandaba un e.mail que titulaba, con mayúsculas, TERMINADO. Quienes conocéis y seguís a Javier sabéis de su empeño en distintos proyectos solidarios, que lidera desde la plataforma AmigoSolidariosLa construcción de un centro de Educación Primaria en Bujagali (Uganda) con los 7 niveles reglados en ese país, con infraestructuras para la enseñanza de oficios (formación profesional básica), campo de deportes y un pequeño parque infantil, es quizá su proyecto estrella, que ve la luz después de varios años de intenso trabajo.

Os invito a entrar en su página web y dedicarle un rato. Creo que merece la pena. Con poco más de 150.000 €, Javier ha sido capaz de poner en marcha  unos servicios y equipamientos para más de 500 niños y niñas de entre 8 y 16 años.

A mi modo de ver, la humanidad se enfrenta a un futuro incierto. Quienes vivimos en lo que un amigo mío llama la ‘sociedad instalada’, a la que nuestros propios hijos pueden tener  dificultades en acceder, asistimos indiferentes, cuando no beligerantes, a la tragedia que se vive al otro lado del Mediterráneo y más abajo. Enrocados en nuestro egoísmo, nos quejamos de las molestias de la inmigración, a la que recurrimos sin complejos cuando nos conviene.

¿Nos hemos preguntado alguna vez por qué esas personas abandonan su familia y su tierra, arriesgando en muchos casos su propia vida? Cierto es que hay personas con espíritu aventurero; y resulta evidente que no es la aventura, sino la más absoluta necesidad y la desesperación la que empuja a esos miles y miles de personas a una huída que nada tiene de romántica. Como cualquiera de nosotros, estoy seguro de que se quedarían mucho más a gusto, en su tierra, con los suyos, si dispusieran de un proyecto vital que fuera más allá de la pura supervivencia. 

A mi modo de ver, lo mejor que podemos hacer quienes vivimos en esa sociedad instalada, es favorecer que los nativos de África, en este caso, puedan vivir y desarrollarse en su entorno; y con muy poco podemos hacer mucho.

Me cuenta Javier y me consta por las cuentas que nos presenta a quienes como yo, modestamente, aportamos nuestro granito de arena, que somos  pocos, muy pocos. Algunas instituciones, algunas empresas, algunos organizadores de carreras populares son el soporte financiero básico de AmigoSolidarios. Sin ese soporte financiero, sería imposible abordar proyectos como los que están sacando adelante Javier y sus más directos colaboradores.

Por los niveles de audiencia que tiene este blog, el tema y las fechas en las que estamos, calculo que este post lo leerán unas quinientas personas. Si cada una de esas quinientas personas destinara un euro al mes, sólo un euro al mes, a AmigoSolidarios, tendríamos seis mil euros más. ¿Sabéis todo lo que se puede hacer con 6.000 € en Uganda, en Kenia, en Etiopía, qué más da? ¿Sabéis que la inversión en educación básica multiplica por once el retorno de esa inversión?

Si queremos que nuestros hijos hereden un mundo mejor que el que nuestra generación ha destrozado, empecemos por ayudar a los más necesitados, aunque no les pongamos cara, a vivir con dignidad.

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