El mejor concurso de longitud con atletas de la G.A.F.

La mañana del 30 de agosto de 1991, mientras mi familia y amigos disfrutaba de la piscina de Labastida, yo estaba viendo en directo por televisión la final de salto de longitud del Campeonato del Mundo de Tokyo, el mejor concurso de longitud de la historia, en el que Mike Powell estableció el todavía vigente, 31 años después, y actualmente inaccesible récord mundial, con un salto de 8.95, ante el que de nada valió la mejor serie de saltos de toda su carrera de Carl Lewis, cuádruple campeón olímpico: 8.68, 8.83, 8.91, 8.87 y 8.84.

Aquello era nivel top mundial. Si nos situamos en el nivel top de Gipuzkoa, esta mañana, en el Control de Mínimas programado por la G.A.F., quienes han tenido la suerte de estar allí, han asistido al mejor concurso de salto de longitud protagonizado por atletas con licencia de la G.A.F.

Empezando por las chicas, Maria Vicente, atleta catalana, residente desde hace más de un año en Donostia, entrenada por Ramón Cid, olímpica en Tokyo en heptathlon, con un salto de 6.80 en su cuarto intento, con viento legal (1,6) ha conseguido la mínima para el Campeonato de Europa a celebrar en agosto en Munich.

La segunda ha sido Irati Mitxelena, con un mejor salto de 6.66 en su quinto intento, que no le vale como mejor marca al contar con un viento de +2,1 a favor. En el sexto, con +1,7 de viento a favor, ha saltado 6.62, que es su mejor marca personal y récord absoluto de Gipuzkoa.

En la foto están las dos con sus entrenadores, Asier San Sebastián y Ramón Cid.

Además de ellas, han competido otras siete atletas, entre las que merecen ser destacadas las hermanas Itsaso y Anari Madariaga, con 15 y 13 años, respectivamente, que han saltado 5.75 y 5.38.

Así ha quedado el concurso:

En la competición masculina han brillado dos atletas del Super Amara B.A.T.: Iker Arotzena (20 años), tercero en el Campeonato de España Absoluto y campeón de España sub 23, que con 7.81 (+2,0) ha igualado su propio récord de Gipuzkoa absoluto.

El segundo ha sido Juan Errandonea, especialista en triple salto, que en su segundo intento se ha ido a 7.37 (+1,8), que creo que es marca personal.

Sorprendente el tercer puesto de Itoitz Rodríguez, un cuatrocentista que también le da al 200 y al 800, que en su cuarto intento ha saltado 7.23 (+0,0). Todo un fenómeno a estudiar.

Se han sumado a la fiesta Iñigo Labat (6.90) especialista en 400 y 400 metros vallas y el polivelocista Asier Fernández MIndegia (5.74).

Así ha quedado el concurso masculino:

Tras este paréntesis local, imprescindible, mañana volveremos a Eugene.